Saint-Maximin: El bombazo del Club América
Le salieron alas al refuerzo francés; una oportunidad para convertir fútbol en ingresos y títulos.
Por: Diego Solano Sports
DESLIZA 
El América hace oficial la llegada de Allan Saint-Maximin al conjunto de Coapa. Procedente del Al-Ahli, el francés aterriza en la Liga MX con la misión de generar impacto inmediato tanto en la cancha como en la marca. La confirmación recorrió agencias y medios el mismo día del anuncio.
Saint-Maximin no es el primer francés en vestir la camiseta azulcrema. En 2018, Jérémy Ménez llegó como figura europea, pero su paso quedó marcado por lesiones y rendimiento irregular. Esta vez, el club busca que la historia gala en Coapa tenga un desenlace diferente.
El francés firmó por dos años con opción a un tercero, lo que le da al América margen para evaluar su impacto deportivo y de mercado antes de comprometerse a largo plazo, minimizando riesgos financieros. Todo esto gracias al aprendizaje que ha dejado el haber fichado otros jugadores que no dieron resultados.
Este traspaso bomba se cerró cerca de 12 millones de dólares, ubicándolo entre las operaciones más caras del club. Para el América, es ticket élite con potencial de retorno multifuente, apostando a que recupere la versión que brilló en la Premier League con el Newcastle.
Saint-Maximin percibirá entre 3.6 y 4.5 mdd anuales, cifra que lo ubica en el top de la Liga MX. Este nivel de remuneración obliga a activar ingresos fuera de la cancha para equilibrar la inversión, pues el gasto total oscila entre los 19 y 21 millones de dólares. Si se activa la extensión y se suman bonos, la cifra podría superar los 25 mdd.
En lo deportivo, su capacidad para encarar y romper líneas puede elevar el nivel ofensivo del América, incrementando las probabilidades de éxito en todos los torneos, lo que a su vez potencia la exposición mediática. En el corto plazo, el reto será la adaptación a la altura de la ciudad, idioma y ritmo competitivo tras semanas sin actividad.
La llegada de Saint-Maximin es un movimiento estratégico que combina rendimiento inmediato con potencial comercial, el cual también se buscaba con Bouanga pero no se dio, y ahora el América deberá transformar el hype en resultados y métricas de negocio que justifiquen cada dólar invertido.
